¿Quiénes somos?
Una protectora pequeña, una aspiración grande
En la Sierra Norte de Madrid, Pérrikus es una pequeña protectora que desde el año 2002 se dedica a rescatar y cuidar a animales abandonados. Nuestra mayor aspiración es regalarles la felicidad que la vida una vez les negó, brindando un hogar temporal a aquellos que más lo necesitan y ayudando a encontrarles una segunda oportunidad a través de la adopción. Cada día, nuestro equipo trabaja de manera incansable para que cada perro reciba los cuidados y atención que merece, asegurando su bienestar hasta que pueda encontrar un nuevo hogar. Nuestros perros pasar cada día varias horas en libertad, consiguiendo así un un buen equilibrio físico y emocional.
Pérrikus no solo se esfuerza por cuidar a los animales albergados en nuestra protectora, sino que también buscamos concienciar y educar sobre la adopción responsable.
El porcentaje de abandono y maltrato animal de nuestro país es uno de los más grandes de la Unión Europea. Por ello, es necesario sensibilizar a la población, educar a las nuevas generaciones y denunciar los casos de maltrato animal.
Además, hacemos campañas de esterilización de manera permanente para ayudar al cumplimiento de la nueva Ley de Bienestar animal y para evitar la proliferación de camadas no deseadas.
1. El principio: con la recogida de un animal se inicia un costoso protocolo veterinario que incluye vacunas, análisis, pruebas, esterilización y cualquier tratamiento que necesite para asegurar su bienestar.
2. Mientras esperan: las características únicas de cada animal, junto con su historia, son difundidas con el objetivo de encontrarles una familia ideal. En el albergue, reciben atención de cuidadores profesionales y voluntarios que se esfuerzan por educarles para una mejor adaptación a su nuevo hogar.
3. Su familia: cuando nos contactan para adoptar, el proceso está guiado por voluntarios que ofrecen apoyo y consejos. Posteriormente, tratamos garantizar que tanto el animal como la familia estén satisfechos a través de seguimientos. Nuestros perros (y sus nuevas familias) nos tienen de respaldo durante el resto de su vida. Nuestro trabajo no termina con la adopción.
Nuestras metas